Los Mossos d’Esquadra han desarticulado una trama de pederastas por agresiones sexuales grupales a menores de 16 años captados en redes sociales, además de por producción de pornografía infantil y prostitución de menores, con 11 víctimas identificadas, han detenido a 16 personas, entre ellas, a su máximo responsable.
La investigación de los Mossos d’Esquadra se mantiene abierta, ya que tratan de identificar a otros 14 pederastas y a una quincena más de víctimas de esta trama, según explicaron el viernes pasado en rueda de prensa los investigadores del Área Central del Cibercrimen de la División de Investigación Criminal (DIC) del cuerpo.
Además de estas agresiones sexuales grupales a menores de entre 12 y 17 años de edad, cometidas en su mayoría en un domicilio de Barcelona, el principal investigado, en prisión preventiva, grababa los hechos y los compartía con otros pedófilos.
Los investigadores encontraron durante el registro policial en el piso del principal sospechoso material informático con unas 2.000 conversaciones, de ellas, 120 con contenido pedófilo y 250 vídeos con agresiones sexuales a menores de edad, cometidas por él mismo o por terceros.
Las víctimas
Las víctimas, captadas en una aplicación de citas de adultos o en redes sociales como Instagram o Facebook, tienen perfiles diferentes: desde menores con una situación psicosocial vulnerable a otras procedentes de entornos más estables. En este sentido, los investigadores advierten del riesgo que hay detrás de un móvil o de una tablet, ya que trasladan al menor a un «mundo abierto», con muchas tipologías de delito.
De las 11 víctimas identificadas, dos eran niñas y las otras nueve eran niños. De hecho, el responsable de la trama creó un clima de confianza con una de las niñas para captar a otras víctimas menores.
El líder de la trama
Según explicaron los Mossos, el responsable de la trama, un hombre de 48 años de edad, con trabajo estable y con antecedentes policiales por prostitución de menores en Valencia en 2010, no obtenía ningún rédito económico por estas agresiones sexuales o por grabarlas en vídeo, sino un «beneficio personal»; «disfrutaba organizando estos encuentros u orgías, grabarlas y participaba en algunas de ellas». «Es un depredador sexual»
Las agresiones sexuales a estos menores que investigan los Mossos se cometieron entre los años 2016 y 2022, principalmente en el piso del responsable de la trama en Barcelona aunque también en otras ciudades como Madrid y Valencia, si bien los investigadores tienen la intuición de que inició esta actividad delictiva en la capital catalana mucho antes.
El responsable de la trama grababa las agresiones
El responsable de la trama grabó muchas de estas agresiones sexuales con un teléfono móvil o con cámaras ocultas, sin que las víctimas, ahora mayores de edad y de las cuales diez ya han prestado declaración, se dieran cuenta de ello.
Durante el registro policial en su piso, situado en Ciutat Vella, en Barcelona y en el que tenía habitaciones turísticas alquiladas sin licencia para no levantar sospechas sobre la entrada y salida de pedófilos, los Mossos encontraron más de 200 GB de material audiovisual y conversaciones.
En concreto, 250 vídeos con agresiones sexuales a los menores grabados entre 2016 y 2022 y unas 2.000 conversaciones, de las cuales seleccionaron 120 por su contenido pedófilo.
En las conversaciones, los investigadores hallaron un hilo en el que, durante seis años, el principal sospechoso y otro pedófilo compartían su actividad criminal y en el que los Mossos han podido contabilizar referencias de hasta 79 agresiones sexuales a menores.
Una larga y compleja investigación
La investigación de la Policía de la Generalitat se inició a finales de 2021, cuando un menor de 12 años denunció que era objeto de agresiones sexuales en un piso de Barcelona, al que también iban otras víctimas, y ha durado más de dos años debido a su complejidad a la hora de identificar a multitud de menores agredidos y a pedófilos.
Las detenciones se practicaron en los municipios barceloneses de Barcelona, L’Hospitalet de Llobregat, Badalona, Vilanova i la Geltrú, Mollet del Vallès y Sant Boi, además de en el madrileño de Aranjuez, donde el arresto se hizo junto con la Policía Nacional.
