La T-Movilidad podría estar operativa a finales del año 2024. Es el nuevo plazo que ha dado el govern de la Generalitat este lunes, después de anunciar que ya ha abierto el concurso público para la instalación de las máquinas que tendrán que validar este nuevo título de transporte.
La maquinaria se tendrá que instalar en autobuses urbanos e interurbanos y en las estaciones de Rodalies-Renfe y de Ferrocarrils de la Generalitat de toda Catalunya. El contrato, es por un importe total de 21,6 millones de euros, y se quiere adjudicar antes de verano. El sistema único de validación podría activarse a finales de este año o principios del 2023 en las siete coronas de la ATM de Barcelona, y a finales del 2024 en toda Catalunya.
Desaparecerán los títulos de cartón
La nueva maquinaria provocará que desaparezcan los títulos de cartón que usamos actualmente y cambiar el sistema de pago actual, por uno de basado en la distancia recorrida por cada usuario y por el hecho de si coge el transporte público de forma habitual o no. Cómo se hará este cálculo de tarifas por kilómetro todavía no se sabe. En principio habrá una zona cero de tu entorno con tarifa plana, que se calcula que será unos 10 kilómetros a la redonda, y el precio irá subiendo progresivamente a medida que se hagan kilómetros con transporte público. El objetivo es que nadie pague más de lo que paga en este momento, según la Generalitat.
El sistema tarifario integrado de la T-Movilidad aspira a alcanzar un total de 296 municipios catalanes repartidos en las seis zonas tarifarias (para cualquier medio de transporte público). Viajar a cualquiera de estas zonas se pagará con una sola tarjeta de plástico, parecido a una tarjeta de crédito, con tecnología sin contacto, que solo habrá que acercar al lector para validar el viaje, o por una aplicación descargada en el móvil.
