Las recomendaciones anunciadas por la alcaldesa Núria Marín, y la consellera Vergés el martes por la tarde parece que de momento se están cumpliendo notablemente.
Esta mañana dando un paseo por el barrio de Collblanc y la Torrassa, lo primero que se puede constatar es que la afluencia de gente en la calle ha disminuido considerablemente. Tampoco es que el tiempo hoy acompañe mucho para dar un paseo. Pero la sensación, es que existe un cierto concienciamiento social en el uso del espacio público, solo para lo más imprecindible.
Los agentes cívicos se los visualiza rápido, y no paran de ir arriba y abajo de las calles y las plazas, aconsejando, y haciendo pedagogía. Ojalá hubieran empezado unas semanas antes.
La presencia de Guardia Urbana y Mossos, también es permanente. Todo el mundo lleva la mascarilla, siempre puede haber alguna excepción pero es difícil de encontrar.
Parece que el tema se encarrila, «una flor no fa estiu», pero vamos a ser positivos a ver que pasa en los próximos días. Que no se baje la guardia.