El inicio de curso nunca es fácil en las escuelas. Los docentes y los alumnos después de dos meses de parón estival deben coger el nuevo ritmo. Este año el Covid-19 aún hace más complicada esta vuelta a las aulas.
Las familias lógicamente están preocupadas. Un curso incierto, en que es muy difícil hacer previsiones y compaginar obligaciones laborales con las familiares.
Todas las escuelas están preparando el curso 2020-2021 con un gran esfuerzo por parte del profesorado. Un ejemplo es el Institut Torras i Bages en el barrio de Can Serra de L’Hospitalet, donde la semana pasada se realizó un simulacro de entrada, y así poder comprobar que todo funcionaba correctamente, y corregir aquellos puntos que podían chirriar.
En este caso el instituto ha preparado tres entradas diferentes para evitar aglomeraciones, controles de temperatura, grupos burbuja…