Dos agentes de la Policía Nacional destinados en la Jefatura Superior de Policía Nacional de Catalunya, salvaron la vida a una mujer que sufrió un infarto mientras viajaba en un vagón del metro de Barcelona, en la estación de Santa Eulalia de la L1, en L’Hospitalet de Llobregat, aplicando maniobras de RCP durante más de 20 minutos y haciendo uso de un DEA, hasta la llegada de los servicios sanitarios de emergencia.
Los dos policías acababan de terminar su jornada laboral, por lo que se encontraban libres de servicio y se dirigían a sus domicilios haciendo uso del metro. A la altura de la estación de Santa Eulalia de la línea 1, escucharon gritos de auxilio que procedían de un vagón, por lo que se dirigieron a la carrera hasta el lugar, donde se encontraron un gran tumulto de gente y una mujer tendida en el suelo que no respiraba ni tenía pulso.
Una vez se identificaron como agentes de Policía Nacional y comprobaron que la mujer carecía de constantes vitales, no respiraba ni respondía a estímulos, es por lo que decidieron colocar a esta mujer en posición adecuada para iniciar las maniobras de reanimación cardio-pulmonar. A su vez se coordinaron con el personal de seguridad y trabajadores del metro para dar aviso a los servicios sanitarios de emergencia.
Durante las maniobras de RCP que duraron más de 20 minutos los agentes tuvieron que realizar varios relevos por el importante esfuerzo que supone y el agotamiento que implica
En el lugar se encontraban dos personas, un enfermero y un estudiante de enfermería que supervisaron y aprobaron la iniciativa de los agentes. Estas maniobras de reanimación duraron más de 20 minutos y dado que requiere un gran esfuerzo para ser aplicadas correctamente, los agentes se tuvieron que relevar coordinadamente entre ellos en varias ocasiones para no caer desfallecidos por el agotamiento.
Mientras se realizaban estas maniobras un vigilante de seguridad acercó al lugar un soporte-dispositivo: Desfibrilador Externo Automático (DEA). Los agentes utilizaron este dispositivo DEA, siguiendo las instrucciones de uso y la máquina tuvo que realizar dos descargas consecutivas sobre la mujer.
A la llegada de los servicios de emergencia la mujer comenzó a recuperar las constantes vitales (pulso y respiración) muy levemente, por lo que tuvo que ser trasladada hasta un centro hospitalario.
El responsable médico de emergencias informó a los actuantes que la mujer había sufrido un infarto y que gracias a la rápida actuación de los agentes, se consiguió mantener con vida a esta persona, ya que cuando ocurren este tipo de sucesos, los primeros minutos son vitales para aumentar el porcentaje de la probabilidad de vida y reducir asimismo el porcentaje de posibles secuelas.
Tras contactar con la afectada, la misma explicó que había estado tres semanas ingresada en el hospital y que, en estos momentos, se encuentra en su hogar recuperándose totalmente de las lesiones sufridas tras su accidente cardiovascular. Así mismo agradece la rápida actuación de los Policías que no dudaron ni un instante en prestarle auxilio.
