Según publica en la edición de hoy miércoles La Vanguardia, en un reportaje de Ana Macpherson, “La situación en Catalunya es crítica”, sentenció el epidemiólogo Jacobo Mendioroz, coordinador de la unidad de seguimiento Covid-19 en la presentación de los datos actuales.
“En tres semanas hemos multiplicado por cinco, hay más casos en la comunidad, la edad media de los afectados está subiendo y los contagios ya están afectando a los ámbitos más vulnerables, como las residencias. Crece muy rápidamente”.
La subida es angustiosa en todos los territorios, pero destaca el área metropolitana sur, con L’Hospitalet en una situación complicada de nuevo: un índice de reproducción de 1,9 (la media es 1,5) y el 15,2% de las PCR hechas son positivas.
Barcelona ciudad está entre las regiones mejor situadas, aunque gana Lleida. Camp de Tarragona y Catalunya Central también tienen un ascenso más empinado
Las medidas que se avecinan serán más duras, en ningún caso retrocederán, “no hay ningún motivo para pensar que se pueda dar marcha atrás”, advirtió Marc Ramentol, secretario general del Departament de Salut.
“Las medidas están en estudio, los técnicos necesitan trabajar sobre ellas con cierto aislamiento de la presión ambiental. Habrá que adoptarlas antes de que decaigan las medidas tomadas hace 11 días. Antes del día 30”.
Al final del día, las distintas piezas del Govern parece que se organizaron para dejar de anunciar ideas contradictorias como estaba ocurriendo desde el lunes, agravando la angustia de la sociedad.
Se ha llegado a defender por parte de diferentes miembros del Govern el confinamiento total o de fin de semana sí o todo lo contrario, la apertura de bares a cambio del toque de queda, la obligación del teletrabajo o nada de eso porque no tenemos la competencia.
Realmente los técnicos tenían difícil concentrarse en su dictamen sobre qué es lo que hay que hacer ante esta situación ya insostenible.
El cierre de bares y restaurantes y la recomendación de teletrabajar y no salir en la medida de lo posible parecen haber tenido cierto efecto. “No ha dejado de crecer la expansión de la epidemia pero parece que a menor velocidad. Pero sigue creciendo y nuestro sistema sanitario no lo podrá aguantar muchos días más”, advirtió Ramentol. “Ha servido quizá para modular, pero necesitamos desacelerar y doblegar la curva, bajar esa expansión, y eso requiere dar nuevos pasos. No habrá retroceso en medidas hasta que la situación esté controlada”.
¿Castañada? ¿Halloween? “No es el momento, la verdad, la situación es crítica”, remató Mendioroz. El epidemiólogo repite que hay mucho que hacer a nivel individual para protegerse y proteger a los demás del contagio.
.