Los Barrios de La Florida y Pubilla Casas, han vivido transformaciones determinantes a nivel sociológico los últimos años. Una mala planificación urbanística promovida por los ayuntamientos franquistas, ha provocado que sean unos distritos densamente poblados.
Ha habido que luchar mucho para ganar espacios públicos. Ha sido un trabajo tenaz y constante, donde la sociedad civil ha tenido un papel crucial. Los diferentes gobiernos de los ayuntamientos democráticos desde el año 1979 con el Alcalde Pujana, han hecho grandes esfuerzos en crear una red de servicios e instalaciones competentes y modernas. Seguramente aún falta hacer más, pero se ha hecho muchísimo trabajo. El urbanismo dentro de las posibilidades heredadas ha mejorado notablemente. Hay mucho por hacer, pero no se puede olvidar de donde veníamos.
La “regidora” del distrito, Lola Ramos, está al pie del cañón cada día. Es una persona cercana, y que no tiene ningún inconveniente en afrontar los problemas. Está haciendo un buen trabajo con su equipo. Problemas de convivencia los hay. Pero no nos engañemos son una minoría los que los crean. La gran mayoría de los vecinos, son personas trabajadoras que luchan cada día para encarar el futuro de sus familias. Son personas de convivencia hayan nacido donde hayan nacido.
Ahora es el momento que los cuerpos de seguridad actúen, que también lo hacen, pero todavía falta hacer más. Los Mossos d’Esquadra tienen las competencias en seguridad ciudadana. Y a este cuerpo y a sus responsables se les tiene que exigir más. Más agentes, y más actuaciones. En la última junta de seguridad local, esta fue la conclusión. Los ciudadanos tienen que vivir en paz, y poder andar seguros por la calle.