En este primer fin de semana de cierre, y confinamiento en el término municipal, observamos la situación en que se encuentra algún punto de L’Hospitalet, en este caso con el municipio de Cornellà.
Una calle de 3,5 metros de ancho delimita, la separación de los dos municipios, la de Femades. En el de Cornellà, la casa de la familia Femades, marca el final de su término municipal.
La familia Femades, ya era una de las familias más destacadas, como pertenecientes a las oligarquías de L’Hospitalet, en el SXVI, según apunta el historiador Jaume Codina, en su libro «L’Hospitalet de Llobregat 1573-1632». El historiador del Prat de Llobregat, lo escribe como Famades, en la página 37 de su libro.
A principios del SXIX, el antiguo Instituto Geográfico y Estadístico y el Instituto Geográfico Catastral empezaron a delimitar los límites de todos los municipios españoles.
Los conflictos entre ayuntamientos por la propiedad del suelo, eran constantes y variopintos. El trabajo del Instituto Geográfico sirvió en gran manera para cortar los choques entre ayuntamientos, por las zonas limítrofes.
El paso del tiempo y las limitadas técnicas empleadas entonces, sin embargo, han acabado por desdibujar aquellas líneas intermunicipales, provocando que los antiguos enfrentamientos regresen a escena.
