Francisco Gilavert Casals, falleció ayer jueves 8 de diciembre, después de una larga enfermedad, a los 68 años. Paco, para muchos de sus amigos, era de aquellos vecinos de Collblanc i la Torrassa de los de toda la vida. Había regentado un bar, el Oasis, donde servían comidas buenísimas en la calle Vallparda, junto con su mujer Montse que era quien cocinaba. El lugar era punto de encuentro de vecinos y amigos, para charlar, beber, comer bien, y coser amistades de las que duran toda la vida. Él había pasado su infancia en el Passatge Oliveras, y después se trasladó a la calle Pujos antes de recalar en la calle Vallparda. Siempre en el mismo barrio
Era un hombre campechano, sincero, y muy próximo. Mirada franca, un entusiasmo y alegría que contagiaba, y que no perdió ni en los momentos mas duros de la enfermedad. Siempre se levantaba a primera hora de la mañana, y no paraba. Una de sus grandes aficiones era la recolección de «bolets», y espárragos, con su grupo de amigos. Los «bolets» los cogía durante casi todos los meses del año, según me había comentado, en alguna de las conversaciones que habíamos mantenido. Para cada época sabía el lugar donde encontrarlos. La recolección de setas la combinaba con los espárragos trigueros, y otros frutos que proporciona la naturaleza.
Desde el TOT L’HOSPITALET, mi más sincero pésame, descansa en paz Francisco. TEXTO: ANTONI RAMÓN RUBIO I BERENGUER
