La Policía Nacional alerta de una nueva estafa cometida a través de WhatsApp: los delincuentes contactan con madres haciéndose pasar por sus hijos y les piden grandes cantidades de dinero de manera urgente. Les exigen entre 2.000 y 26.000 euros por un supuesto “problema inmediato” que no se concreta.
Hay casos que argumentan que han cambiado el número de móvil: «Mamá, este es mi número nuevo, se me ha roto el otro móvil y necesito un favor». En otros casos: «¿Me puedes hacer una transferencia para pagar una cosa, que no tengo la tarjeta a mano?». Una vez convencida la víctima, su supuesto hijo le pide una transferencia inmediata a una cuenta cuyos datos facilita.
Así arrancan los mensajes de estos estafadores. Para lograr el engaño alegan que no pueden comunicarse directamente con su teléfono habitual debido a supuestos problemas con su terminal y que no pueden recibir llamadas.
Los estafadores contactan con las víctimas a través de números de teléfono que no corresponden a los reales, pero lo justifican diciendo que han tenido un problema con su móvil y que no pueden recibir llamadas. En un caso hecho público por el cuerpo policial, los estafadores reclamaban 2.900 euros por transferencia, con el argumento que el hijo había extraviado la tarjeta y diciendo: “Te lo vuelvo cuando tenga la tarjeta en la mano“.
Consejo de la policía: comprobar quién hay detrás
Para evitar caer en engaños, la Policía Nacional recomienda calma y evitar las prisas. Antes de hacer ninguna transferencia, hay que asegurarse de quién hay detrás los mensajes para comprobar que sea realmente un familiar.