A partir del 13 de enero ha comenzado el proceso de implantación del nuevo modelo de recogida de residuos en El Prat de Llobregat, un sistema de contenedores inteligentes de apertura con identificación con tarjeta, llavero o aplicación móvil, que se aplicará a los contenedores de la fracción orgánica y de resto. El objetivo es mejorar las cifras de recogida selectiva e incentivar a reciclar a todas aquellas personas que no lo hagan. Asimismo, el sistema permitirá recompensar a las que lo hacen habitualmente: los hogares que utilicen el contenedor de orgánica un mínimo de 7 veces cada dos meses, obtendrán un descuento del 40% en la tasa de residuos, que se cobrará bimensualmente junto con la factura del agua. Además, aquellas personas que visiten el Punto Limpio también podrán obtener un descuento adicional de 1 € por cada visita, con un máximo de 6 € anuales, llegando hasta un 45% de reducción de media en su factura. En el caso de los comercios la tasa se abonará una vez a final de año directamente y para obtener el descuento del 40% será necesario utilizar el contenedor 40 veces en un año como mínimo, en caso de generar materia orgánica.
El Prat se convierte así en “uno de los primeros municipios catalanes en convertir un sistema de recogida selectiva, como el que ya se ha implantado en otras muchas ciudades, en una vía para permitir bonificar la tasa de recogida de residuos que la ley estatal obliga introducir a todos los municipios a más tardar en abril de este año”, según ha explicado Quim Bartolomé, Teniente de Alcalde de Acción Ambiental, Energía y Servicios Urbanos, quien también ha añadido que «se ha apostado por una tasa justa, para que quien más recicla pague menos».
Un despliegue por fases y adaptado a cada barrio
La implantación de los nuevos contenedores se realizará progresivamente, para poder atender mejor todas las incidencias y dudas. El despliegue se hará en cinco zonas, comenzando por el Barrio de la Marina el 13 de enero y terminando por la zona centro oeste, en el Barrio de las Casas de la Seda, a principios de abril.
En cada una de estas zonas, los vecinos y vecinas podrán recoger la tarjeta y el llavero que les permitirá abrir los contenedores cerrados de orgánica y queda en tres puntos informativos: dos se instalarán en zonas estratégicas y de paso en cada uno de ellos barrios y uno dentro de un equipamiento. Allí también les explicarán cómo descargarse e identificarse en la aplicación móvil que también permitirá abrir los contenedores. Para asegurar que todos los hogares conozcan el funcionamiento de los nuevos contenedores antes de que éstos se pongan en marcha, se enviará una carta a cada casa. Paralelamente, se celebrarán dos sesiones informativas en cada zona, abiertas a todos los interesados, para explicar los detalles del sistema y resolver dudas. La campaña informativa durará tres semanas en cada zona, tras la que se cerrarán los contenedores. Entonces volverá a empezar el ciclo en la siguiente zona.
Además, desde enero hasta abril se desplegará una campaña informativa, se instalará un punto fijo central de atención en la OIAC (Oficina de Información y Atención Ciudadana, plaza de la Vila, 1, teléfono 93 379 00 50) y los informadores ambientales visitarán todos los comercios del municipio para explicar la nueva medida y repartir los materiales necesarios. Además de las sesiones en los barrios, también se organizarán sesiones informativas con agentes clave del municipio, como las escuelas, las asociaciones comerciales, las personas mayores, entidades, para garantizar su comprensión e implicación en el nuevo sistema. También se ha habilitado la web elprat.cat/recicla para dar toda la información.
Liderazgo de El Prat en la implantación de un sistema eficiente con tasa justa
En Catalunya, a principios de 2024, 334 municipios habían implantado sistemas de recogida selectiva eficiente en al menos el 50% de su territorio. De éstos, 282 utilizaban el sistema de recogida puerta a puerta, consiguiendo una media de recogida selectiva del 76%, mientras que 52 municipios habían implementado contenedores inteligentes, con una media de recogida selectiva del 64%. Generalmente, los sistemas puerta a puerta suelen implementarse en municipios pequeños o poco densos y los de contenedores inteligentes en ciudades grandes, con predominio de las viviendas verticales.
Los contenedores inteligentes se han implantado ya en municipios como Montmeló, Centelles, Montgat o Vilassar de Mar. También hay experiencias en zonas de Lleida, Girona, Manresa y Sant Just Desvern.
Sin embargo, pocos municipios han acompañado a estos sistemas eficientes con la bonificación de la tasa de recogida de residuos, convirtiéndola así en una tasa justa vinculada al grado de reciclaje. Algunos sí que han aprobado ordenanzas que prevén este tipo de bonificación, como es el caso de El Prat, que además ya ha empezado a implantar el sistema para hacerla efectiva. En este contexto, El Prat se posiciona, por tanto, como uno de los primeros municipios catalanes en adoptar un sistema eficiente de recogida que combina la identificación del usuario con una tasa justa de residuos.
Reducción del impacto ambiental y económico en el nuevo modelo
El sistema de contenedores inteligentes, además de premiar los hogares y comercios que reciclen, responden a la necesidad de cumplir con los objetivos de reciclaje establecidos por la normativa europea: el 55% en 2025 y el 60% en 2030. Con el sistema actual de contenedores en la calle, el municipio se encuentra en el 38,14% de recogida selectiva, lejos de los objetivos requeridos.
Con los contenedores inteligentes y la tasa justa se pretende mejorar la separación de la orgánica, lo que supone aproximadamente el 40% del total de los residuos generados en un hogar. Esto permite que esta fracción se destine a plantas de tratamiento donde puede ser transformada en recursos valiosos como compuesto o biogás, disminuyendo así el impacto ambiental de las emisiones de gases de efecto invernadero cuando se mezcla con la fracción resto. También supone una reducción de los costes de tratamiento de los residuos, ya que mientras que gestionar una tonelada de resto (contenedor gris) supone un coste de 130,2 euros, el tratamiento de una tonelada de materia orgánica separada correctamente en el contenedor marrón tiene un coste significativamente menor, de 62,9 euros.
Financiación europea
Parte de este proyecto está financiado con una dotación de 340.720,92 € por los Fondos Next Generation de la Unión Europea, dentro del marco de los Planes de Recuperación, Transformación y Resiliencia, con el apoyo del Gobierno del Estado y la Generalitat de Cataluña, a través de la Agencia de Residuos de Cataluña.