Las redes vecinales de trueque han crecido exponencialmente en los últimos años debido a los problemas económicos y a una mayor concientización de la necesidad de reutilizar y reciclar.
En Bellvitge una vecina del barrio, Núria Benítez, publicó en el grupo de vecinos Bellvitge City una imagen de un banco situado en el barrio, y que me llamó la atención: parece ser que de vez en cuando alguien dejaba algún libro, para quien quiera pueda llevárselo a su casa, leerlo y devolverlo al mismo sitio. Una iniciativa a la que se puede sumar quien quiera, y que quiera compartir alguna lectura.
El banco se encuentra detrás del colegio Marina, en la esquina de rambla marina 420 delante del restaurante Industria, nos indica Núria.
No tenemos constancia que sea una acción organizada, sencillamente se debe a una iniciativa espontanea, de alguien que tiene amor por los libros, y que quiere compartirlos. Sea lo que sea, es muy interesante, desconocemos quien ha empezado, y si quiere contactar con nosotros y explicárnoslo estaremos encantados. Núria, ha pensado en bautizar el paseo, como el paseo de los libros, y lo va a proponer.
En alguna población de España, nos consta que se ha montado alguna biblioteca callejera, al principio con pocos libros como un primer depósito, que con el paso del tiempo ha ido creciendo hasta contar en la actualidad con más de cincuenta ejemplares.
La dinámica de estos espacios literarios es que cada vecino, puede llevar cualquier libro que ya haya leído y no quiera seguir guardando en casa, así como coger cualquiera de las obras disponibles para poder disfrutar de ellas que luego tendrá que devolver cuando finalice, para que otra persona tenga la posibilidad de leerla también.
En algunos mercados de L’Hospitalet, como el del Centre y el Merca 1, de Bellvitge se han colocado libros en algún rincón que sirven para leer allí mismo, o bien llevárselos a casa.
