La Florida:
El barrio de la Florida, en l’Hospitalet de Llobregat, nació en los años sesenta, en el espacio que eran unos terrenos de viñas y algarrobos, que hasta entonces, como el barrio de Pubilla Cases, se conocen como con el nombre de Samontà.
En el año 1926 se aprobó un plan de urbanización con la intención de ordenar una zona que tenía el atractivo de estar muy bien comunicada y tener un clima saludable. Eran los tiempos del ideal urbanístico, la ciudad-jardín, y el propósito era ofrecer a los obreros un núcleo residencial, pero el plan, como se ha podido comprobar nunca se hizo realidad.
La Torrassa:
El Torrassa es otro de los barrios de L’Hospitalet que tomó el nombre de una masía de la zona: la Casa de la Torrassa o Torre Llampada (en algún momento de su historia le cayó un relámpago y de aquí el nombre popular). La masía se construyó sobre los restos del Castell de Bellvís, y el nombre de ‘torrassa’ recordaría la existencia de una gran torre fortificada.
En el siglo XX llegaron muchos inmigrantes atraídos por las posibilidades de trabajo por las obras del Metro y de la Exposición Internacional de 1929, entre los nuevos vecinos de la Torrassa, había tantos murcianos que el barrio se conocía como la ‘Murcia pequeña’.
Santa Eulàlia:
El barrio de Santa Eulàlia toma su nombre de la iglesia de Santa Eulàlia de Provençana, la más antigua de l’Hospitalet de Llobregat (consagrada en el año 1101). Probablemente el topónimo Provençana, como Sant Martí de Provençals, es una derivación del término latino ager provintialis, que era como los romanos denominaban los labrantíos, o tierras cultivadas, próximos a las colonias. En Santa Eulàlia empieza el término municipal de L’Hospitalet. FUENTE: TMB, si queréis añadir, comentar, o rectificar para ampliar la información, estaremos encantados.
