Los hechos ocurrieron en la noche del sábado al domingo en la avenida de Carmen Amaya en el barrio del Gornal de L’Hospitalet. Hacia las cuatro de la madrugada los bomberos recibieron un aviso de un incendio, enviando una unidad que en media hora pudo sofocar el fuego, a pesar de la rapidez los coches quedaron destruidos.
A mediados de noviembre ardieron cinco vehículos en el barrio de la Florida, y en el Gornal cinco más a finales de septiembre, en la avenida de Vilanova.
El perjuicio a los propietarios de estos vehículos es enorme. Son personas que se pueden encontrar en una situación complicada a nivel laboral, lo que les impide acceder al crédito para poder comprar otro coche, si es que lo necesitan para ir a trabajar, se presenta una situación muy difícil.
Que se lo piensen dos veces los graciosos que se dedican a gastar el tiempo, perjudicando a la gente sin pensar en las consecuencias.
