Barcelona reforzará los controles de las matrículas en la zona de bajas emisiones (ZBE). El Ayuntamiento ha adjudicado la instalación de 42 nuevos puntos de detección, que se añadirán a los 20 que ya hay y que comprueban si el vehículo, en función del hashtag ambiental, puede entrar o no. En total, pues, serán 62, el triple que ahora.
Con la ampliación, un centenar de cámaras vigilarán tanto las salidas de las rondas como el interior de la ciudad, para garantizar que solo pasen los vehículos que tengan el hashtag.
Los controles se distribuirán en lugares como el paseo de Santa Coloma, la ronda del Mig, la Diagonal, la calle Aragón, la avenida Vallcarca o la travessera de les Corts, entre otras.
Cómo funciona la ZBE
La ZBE entró en vigor el 1 de enero del 2020, con el objetivo de reducir los elevados niveles de contaminación de la ciudad. La normativa prohíbe circular por la ZBE a los vehículos más contaminantes, que no tienen hashtag ambiental de la DGT, los días laborables de lunes a viernes entre las 7.00 y las 20.00. Hay excepciones, como los servicios de emergencias y esenciales, transporte de personas con movilidad reducida o de personas con discapacidades que los condicionan el uso del transporte público.
En caso de incumplimiento, la multa son 200 euros. Si coincide con un episodio de contaminación, se añade un recargo del 30%.
