Ya hace muchos meses, por no decir años, que la atención presencial de bancos y cajas a descendido. La fusión y absorción de entidades financieras, y las reducciones de personal han desembocado en un cierre masivo de oficinas. En los últimos meses, diferente colectivos reclaman a los bancos que no abandonen la prestación de servicios a las personas mayores.
Este colectivo, el de las personas de más edad se siente maltratado por las entidades donde tienen depositados sus ahorros. Uno de los problemas con que se encuentran es que han cerrado muchas oficinas e incluso han eliminado los cajeros automáticos.
Este cierre masivo de oficinas, obliga a muchas personas a desplazarse, y muchos de ellos tienen dificultades de movilidad
Además las nuevas tecnologías son una barrera para muchas personas de estas generaciones que tienen móviles sin internet y que no utilizan el ordenador. Además los bancos han reducido la atención presencial y muchos obligan a pedir cita para atender en la oficina.
