La empresa sueca ha abierto, en un centro comercial de su país de origen una nueva tienda de 72 metros cuadrados, para la venta de productos de segunda mano.
Según informa la compañía, la nueva tienda comercializará con muebles y productos de decoración del hogar que ya no se quieran. Por eso, ha habilitado una estación de entrega y reciclaje de los mismos. En ese sitio se limpiarán, renovarán y reciclarán aquellos productos entregados por los particulares, para después ponerse nuevamente de venta al público.
Esta medida se suma a la oferta de muebles de segunda mano ya existente en las grandes superficies. La diferencia es que los productos que se vendan en esa nueva tienda deberán ser reparados antes de la nueva venta al público, mientras que los productos que se permite vender en los grandes almacenes de la compañía no requieren de arreglo o restauración previa.
La nueva rama del negocio se enmarca dentro de una campaña de la empresa sueca para concienciar a la ciudadanía y cambiar la dinámica de consumo irresponsable, frenético y desmesurado en la que estamos inmersos y conseguir un impacto sostenible positivo en el año 2030.
La tienda se ha abierto como una prueba piloto por un plazo de seis meses. Una vez completado el período se analizará si se mantiene la tienda, se expande a otras ciudades o, por contra, abandona temporalmente la nueva rama del negocio.