Agentes de los Mossos d’Esquadra y del cuerpo de la Policía Nacional detuvieron el pasado 22 de septiembre seis personas, cinco hombres y una mujer, de entre 22 y 42 años de edad, de nacionalidad española y marroquí, como presuntos autores de los delitos de robo con violencia, secuestro, lesiones y pertenencia a organización criminal.
Los hechos ocurrieron el 5 de abril de 2021 cuando un hombre fue abordado mientras accedía a su domicilio por una persona que lo amenazó con una arma de fuego y, junto con otras tres personas, irrumpieron en el domicilio y lo revolvieron todo en busca de dinero y objetos de valor.
Posteriormente, los secuestradores se lo llevaron por la fuerza, lo introdujeron en un vehículo y lo llevaron hasta un domicilio de Barcelona. Allí lo retuvieron contra su voluntad y se pusieron en contacto con su familia para solicitar el pago de un rescate como condición para su liberación. Una vez la familia hizo efectivo el pago de 20.000 euros la víctima fue liberada bajo la amenaza que, si no hacía un segundo pago de 40.000 euros más, la integridad de su familia y sus negocios se podrían ver afectados.
El día siguiente de los hechos la víctima denunció los hechos a una comisaría de Mossos d’Esquadra.
Las gestiones de investigación se basaron en un primer momento en la obtención de imágenes, en la inspección policial y la obtención de otros indicios que permitieran identificar los autores, la ubicación del domicilio donde lo tuvieron retenido y al establecer un operativo de protección hacia la víctima y su familia. Una de estas gestiones permitió identificar un vehículo empleado en los hechos, el cual a lo largo de la investigación se desplazó a Algeciras (Cádiz) y posteriormente en Estepona (Málaga).
Por este motivo, en el marco de la coordinación interpolicial, se creó un equipo de trabajo conjunto entre agentes de la Unidad Central de Secuestros y Extorsiones de Mossos y la Unidad de Drogas y Crimen Organizado (UDYCO) de la Costa del Sol y Algeciras de la Policía Nacional.
La investigación permitió identificar plenamente seis personas, cinco hombres y una mujer, relacionadas directamente con el secuestro y a quien se les atribuyen delitos de secuestro, robo violento, lesiones y pertenencia a organización criminal.
Los cuatro detenidos en Barcelona conformaban una agrupación delictiva que, de manera organizada y estable en el tiempo, se dedicaba a la comisión de delitos graves para obtener un rédito económico. En el grupo había un reparto de funciones de sus miembros: tanto en cuanto al liderazgo como la estrategia, de comisión de acciones delictivas, de obtención de inteligencia sobre posibles objetivos, del uso de medios técnicos y otros que actuaban como colaboradores y encargados de la parte logística.
En cuanto a los detenidos de Málaga, eran colaboradores de la organización a los cuales los investigadores pillaron cuando intentaban ocultar un arma de fuego y aparatos de seguimiento electrónico empleados por los integrantes de la banda.
Por este motivo, la investigación fue muy compleja a causa de la especialización de los integrantes del grupo, de su movilidad geográfica y también de las medidas de seguridad que empleaban para dificultar la acción policial, entre las cuales destacan los cambios de domicilio recurrentes de los investigados.
El 22 de septiembre se estableció un operativo policial conjunto entre Mossos y la Policía nacional donde se detuvieron las seis personas investigadas: cuatro en Cataluña y dos a Torremolinos (Málaga). También se llevaron a cabo cuatro entradas y cacheos en sus domicilios de residencia: dos en Barcelona, L’Hospitalet y otra en Estepona (Málaga).
En las entradas y cacheos los agentes encontraron más de 8.500 euros en metálico, intervinieron dos vehículos que estaban en uno de los domicilios y que constaban como sustraídos además de dos vehículos más propiedad de dos de los detenidos, que utilizaban como medio para cometer acciones delictivas. Además se intervino documentación clave para la investigación, varios juegos de claves otros vehículos, teléfonos móviles y un chaleco antibala.
Los seis arrestados pasaron a disposición judicial. Los cuatro detenidos en Cataluña ingresaron en prisión, mientras que los dos detenidos en Andalucía quedaron en libertad con cargos.
