Segun informa Juan José Fernández para EL PERIÓDICO DE CATALUNYA, el hospital temporal de la Sanidad madrileña en la Feria de Madrid (Ifema) sufre fuertes carencias de medios de protección para el personal sanitario. En algunas de sus áreas, médicos y enfermeros están usando bolsas de basura a falta de batas impermeables y calzas.
«Queremos que los profesionales que se desplazan a Ifema estén protegidos», ha exigido en un vídeo -viral entre la profesión médica- Alicia Martín, presidenta del Sector de Atención Primaria del sindicato Asociación de Médicos y Titulados Superiores de Madrid, AMYTS,
El desabastecimiento de equipos de protección (EPIs) y mascarillas se ha unido a que este lunes haya dejado de funcionar una tienda, o «arco», que la Unidad Militar de Emergencias (UME) había instalado a la entrada de los pabellones de Ifema, donde el personal sanitario era ayudado a vestirse antes de entrar hacia las áreas de enfermos.
El personal de los diversos turnos que se va alternando en el recinto se viste en estancias adjuntas, con una notable ausencia de la recomendable separación entre personas, como muestran fotos que los propios sanitarios han difundido este lunes en las redes sociales.
En el cada vez mayor hospital temporal de la Feria de Madrid hay ya 1.400 camas en funcionamiento, y está previsto que se desplieguen hasta 5.000 camas si es preciso.
«Necesitamos que ese hospital funcione a pleno rendimiento, pero no podemos exponer a nuestros profesionales a que entren sin protección», se queja Martín . Los sanitarios «se hacinan a la entrada sin espacio seguro», lamenta.
El hospital de Ifema, que ayudó a montar la UME y que contó con módulos prefabricados y tuberías de oxígeno en tiempo récord, se extiende ahora por los pabellones 5, 7 y 9 del enorme recinto ferial madrileño (el pabellón 10 es también usado como almacén), y ahora hay «diferencias significativas» entre ellos, según Sheila Justo, presidenta del área de Médicos Jóvenes del sindicato AMYTS. Por momentos, el material que hay en un pabellón falta del todo en otro.
El centro sanitario improvisado ahora adolece de «mala organización», dice no solo Martín, sino también Sheila Justo, que denuncia: «El pasado viernes estaban convocados 60 [médicos] residentes, pero solo entraron diez, y cincuenta se quedaron hacinados en una sala fuera. Necesitamos organización, y necesitamos epis».
Uno de los doctores del turno de tarde, Anxelo Fernández, ha hecho pública una denuncia según la cual no hay mascarillas FFP2 para los facultativos, y visten «batas de tela que no filtran nada y por encima un mandil de charcutería de plástico».
Información editada y publicada en la edición de EL PERIÓDICO DE CATALUNYA