Según ha denunciado Rodalies a través de las redes sociales, el pasado jueves 8 de agosto la compañía tuvo que retirar dos trenes de la circulación por actos de vandalismo.
Estas actuaciones de gamberrismo en los trenes de Renfe, costaron más de 10 millones de euros en Catalunya en el 2023, casi el 50% del coste total para reparar los desperfectos de todo el estado español.
Todas estas actuaciones de perjudicar a los convoyes afectan al servicio, y al bolsillo del contribuyente.