03/12/2024

Por qué el otoño puede afectar tu estado de ánimo: 5 consejos para prevenir el desánimo

Me falta, entusiasmo, me cuesta levantarme, tengo menos energía…

TARDOR

PIXABAY

20/09/2024

Este año 2024, el otoño meteorológico hace días que ha llegado, a diferencia de años anteriores, que el verano se alargó muchos días más.

Como nos influye en el estado de ánimo:

«Me falta entusiasmo», «me cuesta levantarme», «tengo menos energía». Se puede llegar a pensar de que se trata de una sensación que se vive a nivel individual, pero no es exactamente así. Es común que el otoño impacte con diferente intensidades, en los estados de ánimo de las personas, propio de épocas del año con frío y poca luz.

Y puede ocurrir no solo en invierno, que es el período del año con los días más cortos y fríos, si no también en otoño, en que se produce un contraste rotundo con el verano, una estación, en que solemos disfrutar plenamente del sol y el aire libre, y disponemos de las condiciones ideales para poder interactuar más socialmente.

El efecto en el estado de ánimo del cambio de estación no suele ser incapacitante en personas sin trastornos psiquiátricos, pero sí verse acompañado por una sensación de desgana.

El desánimo y la baja en los niveles de energía son los efectos más comunes, y pueden presentarse de manera tan sutil como una mayor dificultad para levantarse a la hora de siempre, parece que necesitamos más tiempo para sentirnos descansados.

Se pueden manifestar síntomas similares a los de la depresión: angustia. ansiedad, pérdida de la capacidad de disfrutar, insomnio o aumento del sueño, falta de iniciativa, disminución del apetito, desesperanza. ideas de rutina…

Qué ocurre a nivel biológico para que sintamos menos energía en estas circunstancias

El problema central es la carencia de vitamina D, cuyo metabolismo está directamente ligado a la exposición a la luz solar. Esta vitamina está asociada al correcto funcionamiento del aparato inmunológico, al metabolismo del calcio y la regulación de la presión arterial.

La carencia de vitamina D, puede prevenirse con suplementos vitamínicos y con un aumento racional en la ingesta de pescado azul, huevos y alimentos enriquecidos en su procesamiento tales como leche, yogur, harinas y cereales, explican los especialistas.

El otoño y el invierno nos remiten a imágenes arquetípicas, muy ligadas a la soledad, la distancia, la vejez, el desamparo. Ell otoño y el invierno como representantes del comienzo del fin del viaje de la vida.

Como podemos evitar esta sensación de desasosiego

1. Se puede salir a caminar temprano, por la mañana: que el sol nos dé en la cara puede tener un impacto positivo. Mantener la actividad física. En caso de que las temperaturas frescas inviten menos a salir, hacer ejercicio dentro de casa con la utilización de aparatos suele convertirse en una opción más simple y económica de lo que parece.

2. Sostener una rutina, en la que se respeten los horarios de comida y de actividad.

3. Sostener los vínculos familiares y sociales es fundamental.

4. Estimular la actividad creativa activa. No es necesario ser un experto, pero la ejecución de instrumentos musicales, el canto, el baile, la lectura o la escritura, el dibujo o cualquier actividad artística que pueda resultarnos atractiva es de incalculable valor en estos casos.

5. Paliar la falta de vitamina D, tal como hemos explicado anteriormente

En caso de que el estado de ánimo más triste, apático y depresivo, persista, es conveniente visitar a un especialista.