El suceso ha ocurrido hacia las 14:30 h de este viernes, en la estación de la L1, del Metro de Can Serra, en L’Hospitalet, cuando una persona, de edad joven, y que podría tener algún problema de salud mental, ha intentado suicidarse precipitándose a las vías.
La circulación de trenes ha sido interrumpida inmediatamente, y solo se prestaba el servicio entre la estación de Bellvitge, y rambla Just Oliveras, i Torrassa y Fondo.
Hasta el lugar se han desplazado, patrullas de la Guardia Urbana, Bomberos, y SEM.
La estación ha sido desalojada, y el joven herido, aun con vida, ha sido trasladado al Hospital de Bellvitge con vida, aunque muy grave.
Según algunas versiones, las heridas más importantes las ha sufrido en las extremidades. Además, una segunda persona ha sido evacuada también por el SEM de la estación de Can Serra. Podría ser la conductora o el conductor del convoy en el momento que del accidente.
Hace una hora aproximadamente, que el servicio del metro se ha restablecido.
Visibilizar el suicidio es el primer paso para prevenirlo
Visibilizar la realidad del suicidio y romper el tabú que todavía hay a su alrededor es una de las medidas que debemos llevar a cabo y en la que todos, en mayor o menor medida, podemos actuar, defienden desde el Gobierno de España.
En este sentido ha asegurado que el Ministerio de Sanidad, tiene “el firme compromiso de abordar el suicidio”. Para ello, según ha explicado, desde 2006, se impulsa y promueve, en colaboración con las comunidades autónomas, la Estrategia de Salud Mental, según la ministra.
Una línea estratégica es sensibilizar y mejorar la información a la población general a través de acciones de concienciación promovidas por instituciones públicas, medios de comunicación y entidades sociales dedicadas a la causa.
También se prioriza detectar precozmente el riesgo suicida mejorando el acceso y atención en los servicios sanitarios públicos. Entre las medidas concretas para llevar esto a cabo, se pretende desarrollar una red de atención telefónica coordinada e integrada para mejorar el abordaje a la persona con conducta suicida, porque “existe evidencia científica de que los teléfonos de ayuda tienen un impacto positivo sobre la urgencia suicida”
