Lo avanzó ayer por la tarde TV3, y se ha confirmado la implantación de la medida anunciada el pasado 19 de diciembre. Llevar el patinete eléctrico al transporte público estará prohibido a partir del 1 de febrero. La medida se aplicará en el metro, en los autobuses, en los tranvías, en Rodalies de Renfe y en los Ferrocarrils de la Generalitat.
Lo hacen a instancias de la Autoridad del Transporte Metropolitano, ATM, que da así respuesta a la preocupación de los operadores de transporte público después de que un patinete eléctrico ardiera en el interior de un vagón de Ferrocarrils de la Generalitat. Se trata de un veto temporal, de seis meses, impulsado por la Autoritat del Transport Metropolità (ATM) mientras se resuelve la seguridad de estos vehículos de movilidad personal.
Las baterías de estos vehículos se fabrican con materiales altamente inflamables. Las denuncias que formulen los equipos de intervención de los operadores de transporte público, por incumplimiento de la prohibición de transportar patinetes y monociclos eléctricos a los vehículos e instalaciones una vez pasada la barrera tarifaria, comportarán una sanción de 200 euros .
Para intentar facilitar la movilidad de los usuarios habituales de patinetes, ahora también se podrán dejar en los aparcamientos gratuitos de Bicibox.
La ATM elaborará una propuesta de regulación sobre el acceso al transporte público
Durante este período de seis meses la ATM elaborará una propuesta de regulación sobre el acceso y seguridad de los patinetes eléctricos y otros vehículos de movilidad personal. Este trabajo se desarrollará con la colaboración de los diversos agentes interesados en la seguridad del sistema de transporte : operadores, bomberos, institutos de seguridad de vehículos y otros. FUENTE: BETEVÉ y 324