Aunque nos sorprenda, no todo el mundo tiene claro por qué tipo de cosas hay que luchar en esta vida. Hay quien se esfuerza por conseguir más cosas, por tener más objetos, más dinero, más bienes, sin embargo hay que darse cuenta de que hay que luchar por lo que vale la pena tener… y por nada más.
Hay cosas por las que deberíamos luchar exprimiendo hasta el máximo nuestras fuerzas, hasta nuestro último aliento; hay que luchar por aquellos a quienes queremos. Por nuestro bienestar y equilibrio emocional. Porque nadie es egoísta al luchar por uno mismo. Sentirnos bien con lo que somos y tenemos nos permite hacer felices también a los demás, y si lo necesitan ayudarles.
La vida es una lucha continua, una superación sin descanso. Hay que luchar por vencer a la adversidad y, a su vez, por conseguir aquello que deseamos. Merecen una ayuda, las personas que ayudan y unas palabras de ánimo, al menos, a aquellas personas que aún piensan que no todo está perdido, y que, después de todo el futuro seguro que será mejor.