Uno de los autobuses de la línea L82, que realiza el recorrido entre la Ciutat de la Justicia, el barrio de Santa Eulàlia, y discurre por L’Hospitalet, Cornellà, Sant Boi, Viladecans, y Gavà, se transformó en una piscina improvisada por las filtraciones de agua producidas por el aire acondicionado. Muchos de los asientos no se podían utilizar. El agua que genera el aire acondicionado es totalmente normal y es el resultado del proceso de evaporación que tiene lugar en el interior de la máquina. Lo que no es normal es que el agua penetre en el interior del vehículo como si fuera una cascada.
Arrecian las quejas por el servicio de autobuses entre L’Hospitalet, el Baix Llobregat y Barcelona
El pasado 26 de diciembre, Avanza, el nuevo operador del servicio del Transporte Público entre Barcelona y El Baix Llobregat, empezó a prestar servicio. Esta compañía pertenece a Mobility ADO. El Área Metropolitana de Barcelona (AMB), le adjudicó la explotación del servicio al ganar el concurso. El reciente nuevo operador ha recibido varias quejas de los usuarios en los primeros meses de servicio que afirman que no se está llevando a cabo los horarios ni las mejoras que se comunicaron.
El pasado mes de junio, en la línea L86, los usuarios ya no aguantaron más tras esperar más de 45 minutos la llegada de su autobús y se amotinaron:» Ellos no valoran nuestro tiempo y nosotros no pagamos el billete, a ver si les duele el bolsillo a final de mes a la empresa«. Y dicho y hecho, la mayoría de viajeros se negó en redondo a abonar el billete de un servicio sobre el que solo tienen quejas diarias y continuas.
Hace pocos días los alcaldes de Sant Boi, Viladecans y Cornellà, urgieron a la compañía, que cumpliera con los compromisos, y ejecutara la renovación de la flota. Otra de las quejas que han presentado los usuarios es la suciedad, y el mal estado en que se encuentra la tapicería de los asientos.
