El Ayuntamiento de Barcelona ha anunciado la instalación de 50 radares en las calles del interior de la ciudad.
Con esta red de radares, el consistorio quiere reducir la velocidad y la siniestralidad en la ciudad, que es una de las principales causas de accidentes de tráfico, según la regidora de Movilidad, Rosa Alarcón.
«Hemos detectado un incremento de la velocidad en la ciudad. El exceso de velocidad es una de las principales causas de siniestras. Tenemos que levantar el pie del acelerador«, afirman desde el consistorio.
Este mes de marzo se instalará el primer radar de tramo, en el túnel de la Rovira, entre la plaza de Alfonso el Sabio y la rambla del Carmel, en los dos sentidos.
A lo largo de este 2021, antes del verano, se añadirá otro al túnel de Badal, es decir, a la ronda del mig, entre la plaza de Cerdà y la avenida Diagonal, también en los dos sentidos.