Metges de Catalunya decidió ayer miércoles al atardecer parar las movilizaciones y aplazar la huelga que había convocado a los dispositivos de atención primaria del Instituto Catalán de la Salud (ICS), entre los días 13 y 16 de octubre, ante el empeoramiento de los indicadores de la pandemia de la COVID-19.
El sindicato ha tomado esta decisión “anteponiendo la cura a la salud de la población a la legítima y justa defensa de la mejora de las condiciones laborales y salariales del personal médico, el cual está sufriendo, desde hace muchos años, una sobrecarga de trabajo asfixiante que hace saltar por los aires los más mínimos estándares de calidad asistencial”.
Por este motivo, la organización, mayoritaria entre los facultativos, quiere dejar claro al ICS que no abandona sus reivindicaciones, sino que “solo” aplaza las movilizaciones hasta que la situación pandémica mejore en Cataluña.
“Los responsables sanitarios y la población en general tienen que saber que, si se mantiene el actual proceso de destrucción masiva de la atención primaria, los facultativos, agotados y sin las condiciones adecuadas para el ejercicio profesional, no podremos atender los problemas de salud de nuestros pacientes. Si el presente ya es escalofriante, el futuro será aciago”, concluye.
En este sentido, el sindicato acusa el ICS y el Departamento de Salud de “despreciar” la profesión médica y no atender sus reivindicaciones, “al negarse a sentar a negociar ninguno de las demandas planteadas para mejorar la atención al paciente y las condiciones laborales de los profesionales”.
Por todo esto, MC asegura que continuará luchando “para evitar el desmantelamiento del primer nivel asistencial y no ser cómplice de la negligencia de los responsables sanitarios”. Finalmente, la organización agradece el apoyo que ha recibido de la ciudadanía, de algunos grupos parlamentarios y de representantes otras col•lectivos sanitarios.
