El cuadro ribereño aguantó el 0-0 frente al Sant Andreu y su mejor posición en la tabla al término de la liga regular le valió para clasificarse para la final del próximo día 25 de julio. Se vuelve a quedar a las puertas el Sant Andreu, que mostró una buena imagen en Badalona.
Espectacular despliegue físico de ambos equipos en la primera mitad, que brindaron cuarenta y cinco minutos más que trepidantes.
El esfuerzo en la presión alta empezó a hacer mella en los cuatribarrados y el Hospi lo aprovechó para gozar de sus mejores minutos.
El segundo tiempo no fue menos emocionante, si bien las ocasiones claras brillaron por su ausencia. El Sant Andreu recobró la iniciativa en el juego frente a un Hospi que hizo gala de su férrea defensa y se las jugaba a la contra. En el tramo final y con las piernas escaseando de fuerzas, los cuatribarrados lo probaron con un juego más directo que tampoco surtió efecto.
Algunas decenas de aficionados del Sant Andreu desplazados fuera de las instalaciones terminaron con gritos de ‘directiva dimisión’ y recriminando más al equip
